La vitamina C no es un superhéroe

Complejos vitamínicos: 7 beneficios de la vitamina C

Beneficios VS usos

Hoy estaba desayunando mientras leía un artículo sobre los beneficios de la vitamina C y me he puesto a leerlas en voz alta, y os juro que casi me atraganto. El artículo indagaba, en al menos 20 beneficios de la vitamina C… que si es buena para la cicatrización de heridas, que si es buena para el tratamiento de la caspa, que si es buena para el tratamiento del Alzheimer, pero la que más me ha llamado poderosamente la atención es la que indicaba que se podía utilizar para curar el cáncer.

Yo no voy a desmentir que tenga ciertos beneficios y ciertas virtudes que no tienen otras vitaminas, pero si que me voy a aventurar a haceros llegar las grandes diferencias que existen entre los beneficios y los usos de cualquier principio activo. Alguien que no esté muy puesto en estos temas puede confundir fácilmente estos dos términos que aparentemente parecen iguales pero que para nada lo son.  Es muy importante entender que una sustancia puede tener ciertos beneficios pero que, por otros motivos, no se vaya a comercializar con esa finalidad. Si queremos hablarle a la gente claramente tenemos la obligación de distinguir entre ambos términos.

La vitamina C puede tener muchos beneficios, pero es el tratamiento de elección en algunos y en otros muchos no. Y yo creo que esto es bastante importante para no venderle a la gente que puede curarse de ciertas patologías únicamente tomando Vitamina C de 1000 mg, pastilla diaria, porque sabemos que eso está muy lejos de ser cierto. Nos debemos a nuestra audiencia y aunque en ningún momento se habla de usos si no de beneficios es verdad que rozamos un poco esa línea de transparencia necesaria para que las personas puedan confiar en nosotros. Por eso a mí me gusta hablar de usos.  

¿Os acordáis de la película Superman?... la antigua… la buena… la del año 1978 con Cristopher Reeve de protagonista. Pues Superman valía para todo ¿verdad?, alguien podría pensar leyendo ese artículo que la vitamina C es Superman y no, ciertamente, no lo es. 

Usos contrastados de la Vitamina C

Os comentaré los usos para los que yo sí que tendría en cuenta a la vitamina C.

1.- Para gente que tiene resfriados largos y duraderos. Vitamina C. ¡Ojo! no combate contra el virus del resfriado, simplemente hace que los síntomas sean más leves y dure menos tiempo. Nada más. 

2.- Para gente que desee frenar el desgaste de las articulaciones. Vitamina C. Aumenta la producción de colágeno. Por eso se asocia muchas veces a productos de este tipo.

3.- Para gente que quiera mejorar la textura de la piel y luchar contra su decoloración. Vitamina C. En cremas y ampollas destinadas a tratamientos faciales, sobre todo. 

4.- Para gente que quiera tener un plus diario de energía extra a lo largo del día. Vitamina C. 

5.- Para gente que tenga problemas de visión. Me aseguraría que las vitaminas que tome lleven una cantidad suficiente de vitamina C. Sobre todo, por su poder antioxidante. Pensar que algo que es muy antioxidante tiene un efecto protector sobre los radicales libres causantes del envejecimiento.

6.- Para gente que padece de anemias ferropénicas (carencia de hierro), porque hace que se absorba mejor el hierro. 

7.- Para gente que padece de cistitis recurrentes, porque acidifica la orina y las bacterias crecen peor en este medio. 

Falsas creencias, bulos y mentiras

¿Sabías que la naranja no es la fruta que proporciona la mayor cantidad de vitamina C? Tenemos la falsa creencia de que la naranja y el limón son las frutas que más cantidad tienen de vitamina C, pero nada más lejos de la realidad. La fruta con más cantidad de vitamina C es la guayaba.    

Por cierto, aquello que decían las madres de que te tomaras rápido el zumo de naranja porque se le escapaban las vitaminas es una leyenda urbana. Es cierto que la vitamina C se oxida muy rápido en contacto con el aire, pero el producto de esa oxidación es otro compuesto que tiene las mismas propiedades que la vitamina C.

Tomar vitamina C con marisco es peligroso. Corres el riesgo de intoxicarte. Esta afirmación es falsa. Es cierto que el arsénico de ciertos mariscos puede derivar a formas más toxicas al entrar en contacto con la vitamina C, pero en cualquier caso necesitaríamos cantidades industriales de ambos para notar ese efecto nocivo en nuestro cuerpo. 

Riesgo de un consumo excesivo

Así el consumo indiscriminado de vitamina C puede acarrear algunos contratiempos sobre todo para aquellas personas que sufren de algún tipo de insuficiencia renal. Sobrepasar los 2000 mg de vitamina C puede aumentar considerablemente la posibilidad de padecer piedras en los riñones. 

Así que… cuidado con Superman…